Mi tierno y lindo ahijado te
quiero con amor y ternura eres mi compañero de infortunio quedamos solos
en el desierto de la orfandad miramos al norte, al sur, al este y al oeste y jamás
pudimos volver a ver para nosotros la
celestial figura paterna de nuestros adorados padres ellos fueron nuestros
dioses terrenales lastima grande que tan luego los `perdimos hoy no lo
comprendes con los años lo comprenderás
por tu edad no te puedo aconsejar pero si decirte lo que siento por ti cuando tu seas un hombre yo ya
no estaré en este cochino mundo espero hijo mío divino que el único rigor en tu
vida sea el de tu adorada madre y el de
tu fiel hermano Santi los especiales cuidados de de tu segunda madre “tía rosa”
y los consejos de tus adorados abuelos
paternos y maternos fuiste la adoración de tu padre a tal grado que sus ultimas
palabras antes de morir fueron “ Cuídenme a Mateo” te adoraba tanto como a
Santi eran sus dos ojos te mentó a ti por tu tan corta edad un mes de nacido mi
comadre me cuenta que ya te salieron dos dientecitos y que ya caminas un día de
estos te saliste de la casa a la tienda a querer comprar dulcitos que mi Dios
te cuide hijo lindo
viernes, 5 de junio de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario