CHOQUE DE MI SOLIDARIDAD HUMANA CON UNA ORDEN MÉDICA.

Este día por la mañana acompañe a mi nieto Emiliano Anastasio a un hospital aquí en Nueva York, pues tenían que ponerle unas vacunas , de repente vi un caso de una joven que llevaba a su hijito en un coche cómo de un año de edad y entró al ascensor , a medio entrar el ascensor se cerró , varios casos anteriores había visto pero al contraminar el objeto inmediatamente se abría de nuevo, pero esta vez no fue así , el aparato insistía en cerrarse y la Joven asustada con su bebe gritaba pidiendo ayuda, y yo estaba a cinco metros de distancia ; mi impulso humano por solidaridad fue correr a ayudarle pero me quede entre la espada y la pared; hace quince días sufrí un infartó al miocardio y de emergencia me hicieron una operación , una cirugía de corazón abierto y mi cardiólogo me ordenó estrictamente aparte de muchas restricciones más que yo no podía levantar más de cinco libras de peso con un brazo de lo contrario se me podría abrir la herida que es desde la garganta hasta el
Ombligo, aparte de varias incisiones más , incluyendo dos tubos cómo drenó en ambos pulmones , quede bien tronado a tal grado que en los primeros tres dias de haber recibido el alta sentía unos dolores como que si un carro me había atropellado me dolía hasta el último Huezo de mi cuerpo , en este caso por primera vez en mi vida , no pude auxiliar a una persona que me necesitaba , posiblemente la joven haya dicho: “Que viejo mas turbio, no me ayudo”, por eso caras vemos y cuerpos no sabemos, yo no me podia parar sin mi bastón; (No hay cosa mas triste en este mundo que no poder ayudar al que a uno lo necesita).